INVOCACIÓN A LA ENERGÍA UNIVERSAL

Madre y Padre nuestros que sois el Universo Infinito y todo lo creado y que una de vuestras manifestaciones es el Amor Incondicional. Que florezca en nosotras las personas la semilla que llevamos de vuestra Energía que es nuestra Esencia y así que desaparezca nuestro inconsciente y se haga en toda la humanidad una sola Consciencia Universal y veamos con claridad que: TODOS LOS SERES VIVOS SOMOS UNO EN EL AMOR INCONDICIONAL.

jueves, 13 de agosto de 2009

MANUAL DE HISTORIA UNIVERSAL


"Barco con tormenta en cualquier puerto entra" que decía mi bisabuela.

(Da igual que en este cuento la familia fuese de "pocos posibles" y poca información, eso no es más que una anécdota, otro día conoceremos el mismo cuento en una familia con "posibles" y veremos como este tipo de sucesos pertenecen al manual de "Historia Universal", la anónima y puede suceder en cualquier continente y época)


Érase una vez una niñita que era muy desgraciada, su papá bebía mucho y se gastaba en la taberna el dinero que era para que la familia comiese. Su mamá fregaba muchos suelos y escaleras en casa ajenas y también visitaba la casa de maternidad una vez al año cada año, con la consecuencia de que siempre regresaba de ella con una nueva boca que alimentar. La niñita estaba harta y cansada de tener que cuidar de sus séis hermanitos, siete, ocho, etc. casi desde que había nacido porque ella era la mayor y además mujer, bueno hembra que decían ell@s.
También estaba harta de las borracheras de sus papá, de las lágrimas de su mamá, de los llantos de sus hermanitos, de la miseria y de limpiar mocos ajenos.
Un buen día, cuando ya tenía 18 años, se encontró en la calle con un ex jefe de su papá, que era igual de mayor que su papá y que estaba muy triste porque su esposa se había divorciado de él.
La niñita, que ya no era la niñita sino la jovencita, tenía referencias de que este hombre era "buena persona" así que se atrevió a pedirle que le prestase dinero para marcharse con una tía suya a una cuidad lejana a trabajar.
El jefe fue tan bueno que la refugió en su casa de las iras del papá, la colmó de caricias y mimos, llenó con ella el vacío que su esposa había dejado y ... hasta se casó con ella, tuvieron hijitos y comieron perdices. La niñita-jovencita, barquito con tormenta emocional, mental y física, en aquel momento, vio que el cielo se la abría.
Así pues la niñita-jovencita siguió cuidando retoños, limpiando mocos ajenos y otras cosas, etc. con la diferencia de que ahora a los retoños los traía ella misma de la casa de maternidad y además en su hogar había "posibles".
Un buen día se enamoró de un chico de su edad, dejó a su marido, se fue con él, siguió criando retoños y la "Historia Universal", la anónima, siguió repitiéndose. Su ex marido y su papá dijeron que era mala, su mamá ni dijo.
Y colorín colorado este cuentito se ha terminado.

2 comentarios:

viky frias dijo...

No parece haber salida
para esta situación tan repetida.
Si nos hacemos conscientes
y, siendo muy valientes,
nos apoyamos entre nosotras,
podremos cambiar la historia.
Gracias por denunciar
la ausencia de libertad
que algunas no sabemos ver
y tropezamos en el mismo sitio
una y otra vez.

mgoduver dijo...

Esa historia bien acallada
de tantas y tantas damas
nos parece imposible
que se repita de nuevo.
Y, sin embargo, sabemos
que es difícil cambiar
los ancestrales
comportamientos,
pues, los privilegiados
sólo ponen obstáculos
para que no pueda
llevarse a cabo
el anhelado cambio.