INVOCACIÓN A LA ENERGÍA UNIVERSAL

Madre y Padre nuestros que sois el Universo Infinito y todo lo creado y que una de vuestras manifestaciones es el Amor Incondicional. Que florezca en nosotras las personas la semilla que llevamos de vuestra Energía que es nuestra Esencia y así que desaparezca nuestro inconsciente y se haga en toda la humanidad una sola Consciencia Universal y veamos con claridad que: TODOS LOS SERES VIVOS SOMOS UNO EN EL AMOR INCONDICIONAL.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

EN MI RECUERDO, día de la mujer maltratada, todo está unido, todo está concatenado


Cuando yo tenía unos 20 años y era estudiante (forzada por padre y madre) de derecho en la facultad de Madrid, solía ir a sentarme algunas tardes al paseo de Rosales con mi pareja de entonces a "pelar la pava" lo más lejos posible del domicilio familiar.

Era la época del la dictadura en la cual las mujeres no teníamos voz ni voto, claro los hombres tampoco lo tenían en el plano político pero sí podían ser en sus familias, bien apoyados por las leyes franquistas, los amos de todos sus miembros comenzando por su esposa. Mujer igual a cero a la izquierda y la mujer con la pata quebrada y en casa...

Una de esas plácidas tardes, rodeada de los maravillosos y dulces árboles del Parque del Oeste que desde las terrazas de Rosales se pueden disfrutar, vi pasar a una señora de unos 40 años, calculo yo ahora, acompañada de cuatro niños, tres niñas y un niño, éste último tendría unos siete años. De pronto, muy cerca de donde nosotros estábamos sentados, aquella mujer se puso a pegarle gritos al niño. Casi inmediatamente se sucedieros los bofetones, el niño so se defendía, su madre era mucho más fuerte que él. Las hermanitas se habían arremolinado a un lado llenas de temor.

La madre seguía insultando a gritos al niño y dándole empellones, los que tal vez le hubiese gustado darle a su marido y no podía, hasta que el niño calló al suelo y fue cuando entonces comenzó a pegarle con saña, llena de ira, patadas por todo el cuerpo.

Nadie nos movimos, nadie le defendimos, en aquella España los padres y las madres tenían todos los derechos legales posibles para "castigar" a sus hijos en "pro de la buena educación"

Con mi corazón estremecido contemple la escena de dolor y humillación hasta que terminó.

A mi también mi madre, "señorita de buena familia distinguidísima" cuando yo era niña, me había pegado con saña hasta que cumplí los trece años, edad en la cual le enseñé un puño cerrado y la dije que si seguía se lo devolvería. También mi padre, con su título universitario de carrera superior, me dió puñetazos con el ánimo de convertirme en una "mujer de bien", es decir una persona que no tuviese ideas propias sino las que a él le pareciese oportuno tuviese, hasta los veintiun años edad en que decidí huír del dulce hogar.

Toda violencia engendra violencia, no hace falta para ser niño, niña maltrata@s que te envíen a un hospital. Yo fui niña maltratada física y psicológicamente y también, siguiendo esta cadena maldita de la humanidad que se hereda de padres y madres a hijos e hijas, fuí, sin saberlo, "madre maltratadora" durante siete años, como a su vez me consta que mis padres maltratadores, fueron niños maltratados "con la mejor de las intenciones educativas", las cuales rezumanban por debajo de este manto cosas tan vario pintas como: el miedo a ser mujer y madre, con lo que conlleva de embarazos no deseados, rechazo de la relación sexual, miedo a parir o a sentirse violada sexualmente por el propio marido, el odio a la figura autoritaria paterna o materna, las exigencias imposibles de cumplir, la vergüenza de haber tenido hijas hembras y ningún hijo varón que rebaja o rebajaba la posibilidad de ser una mujer mejor considerada por el esposo, la familia y el entorno social, en China y muchos países más, ésto sigue muy vigente, os recomiendo sobre este tema la novela de Emilia Pardo Bazán "Los Pazos de Ulloa", así que no tenemos porque asombrarnos y que conlleva el desprecio a las hijas hembras pero también en las mujeres el odio a sí mismas y a los hombres "superiores" que en muchos casos recae en los pequeños hijos varones, falso reflejo del macho opresor...

¡¡¡Cuántas veces a lo largo de mi vida he recordado aquella escena en el Paseo de Rosales!!! y me he preguntado ¿no será actualmente aquel niño un hombre maltratador que ve en su pajera el reflejo de la mujer que no podía quererle?

Somos víctimas de víctimas, cadena humana del dolor que si no somos conscientes de ella jamás la podremos romper, jamás nos permitirá vivir en el amor incondicional a hombre con mujer, a mujer con mujer a hombre con hombre.

3 comentarios:

viky frias dijo...

Cierto que hay una cadena de violencia y que el más fuerte la emprende con el más débil, como en los peces u otras especies así de tontas.
Sin embargo, hoy 25 de noviembre es precisamente el día contra la violencia de género, y no repitamos lo mismo de siempre: enmascarar los problemas de las mujeres con los problemas universales de los humanos. Hoy es el día de reflexión sobre la violencia contra las mujeres!

Cons dijo...

Claro que sí que es el día de reflexión sobre la violencia contra las mujeres, pero para mi eso puede andar por ahí suelto como si fuese un eslabón perdido, la violencia contra las mujeres existe por una serie de razones y es eso lo que trato de denunciar, porque si no lo vemos no terminará jamás, siempre vamos a estar con el tema de víctimas y verdugos y ambos están enzarzados en una relación recíproca. Yrato de avanzar más allá, no de justificar a nadie ni a nada.

mgoduver dijo...

Existe una violencia universal
que debemos denunciar.
Hoy se recuerda la de género
y no podemos callar:
sólo unos minutos de silencio
por las víctimas que han muerto.